Las 10 razones más comunes para buscar un coach de pareja

Nunca tivemos nada.Já tivemos algo.Ele é meu namorado.Ele é meu noivo.Ele é meu marido.Ele é meu ex.Continuar.

Seducción


Un coach o terapeuta de pareja puede ser justamente el tipo de orientación que necesitas para mejorar tu relación. Conociendo las 10 razones más comunes para buscar un coach de pareja, podrás descubrir si tu caso es uno de los muchos en los que esta alternativa es parte de la solución

Los casos que conocerás, a continuación, son aquellos en los que los especialistas en relaciones tenemos una gran experiencia.

Así que no dudes en buscar a un coach o terapeuta de pareja si encuentras en la siguiente lista una o más razones que desees trabajar en pareja.

1.- Aislamiento emocional

Buscar un coach de pareja cuando la relación se enfria

¿Sientes que la relación se enfrió, que tu pareja ya no expresa el mismo interés, las muestras de cariño han disminuido así como el tiempo de calidad juntos y la sensación de afecto parece desvanecerse? Incluso, ¿sientes que tu pareja ya no es tu pareja?

Sentir a la pareja lejos, aun teniéndola al lado, y percibir una actitud fría o indiferente, es algo que le sucede a casi todas las relaciones. Pero, cuando esta sensación es muy marcada y recurrente, sin llegar a ser usada para aprender y hacer crecer la relación, tiene un impacto emocional muy fuerte.

Dicho aislamiento es el resultado de alguna de las otras razones más comunes para buscar un coach de pareja que puedes descubrir más adelante. Sin embargo, en ocasiones, también pueden darse por otros motivos no tan comunes.

El profesional en coaching y terapia de pareja se especializa en colocar a ambas partes en la misma página, creando un diálogo franco y directo con el cual puedan avanzar juntos en resolver esa situación de la mejor forma posible.

2.- Discusiones constantes

Cualquier razón o motivo parece ser suficiente para desencadenar una gran y furiosa pelea. El mas mínimo estimulo puede llegar a irritarlos, creando una gran fricción entre ambos.

Es probable que se comience a evitar llegar a casa o evadir ver a la pareja, pronosticando la próxima pelea. Pensar en lo inútil que es discutir sobre el mismo tema, cuando parece que no se llega a ningún acuerdo o las cosas empeoran.

Como lo hemos mencionado en otras ocasiones, una buena relación es aquella que promueve el crecimiento personal de cada parte.

Las discusiones constantes estancan la relación. Pelear con la pareja, constantemente, crea fatiga mental y promueve un ambiente hostil en el cual ninguno de los dos se sentirá bien.

Con las estrategias correctas que les ayuden a romper ese ciclo de enfados y discusiones, comunicarse de forma clara y manejar sus emociones adecuadamente, podrán dejar las discusiones atrás y ver florecer la relación.

3.- Lidiando con problemas familiares

En muchas ocasiones, las presiones externas causan malestar en la pareja. Uno de los problemas más comunes es la presión de las expectativas u órdenes de los padres sobre la relación.

Al sentir que hay una fuente externa que puede dictar la dirección de la relación, la pareja pierde la sensación de control sobre la misma y dejan de sentirla como propia.

Tomar las riendas nuevamente y lograr que la relación se trate de los dos, incluye aprender a poner limites sanos y cambiar las ideas y creencias que permiten a fuentes ajenas tomar dicho control.

Otras de las situaciones familiares que causan conflictos en la pareja es cómo se maneja la crianza.

Ser pareja y ser padres es algo que, a veces, puede ser difícil de llevar de la mano juntos.

Desacuerdos en el estilo de la crianza de los hijos crea una sensación de “tomar bandos” que puede afectarlos como pareja.

Si mandas a tu pequeño a su cuarto temprano porque ha hecho una gran rabieta tras no conseguir una galleta, pero tu pareja va a su cuarto para darle una caja entera de galletas para animarlo, claramente se sentirá que no están trabajando en equipo.

Si hay algo que tiene en común vivir como padres y vivir como pareja es saber ser un equipo.

4.- Buscando un coach de pareja para enfrentar infidelidad

Esta es, probablemente, una de las razones más fuertes por las que se busca la ayuda de un coach o terapeuta de pareja. La infidelidad es un acontecimiento que crea grandes cambios significativos en la pareja, muchos relacionados con el resto de las razones que se encuentran en este artículo.

Tras suceder la infidelidad se genera un distanciamiento emocional, el cual ocasiona que se desee detener la intimidad entre ambos.

Seguir con la relación tras la infidelidad es algo muy personal. Cada persona tiene un concepto muy concreto o muy amplio de aquello que significa ser infiel, desde buscar fuera algo que se supone solo se debería buscar en la relación, coquetear o llegar al acto sexual con otra persona.

Los coaches y terapeutas de pareja ayudan a discernir qué aspectos importantes de la relación se han dañado; esto, con el fin de buscar, junto con la pareja, una forma de sanar, aprender y crecer.

5.- Cuando se elige la separación

Cuando una de las dos partes ha decidido que ya no desea seguir la relación, es común que la otra parte busque una forma de trabajar en aquello que los ha llevado hasta ese punto y solucionarlo. En estos casos, se tiene la esperanza de que aun exista la posibilidad de solucionar los conflictos y continuar fortaleciendo el vínculo amoroso.

De igual forma, cuando en un matrimonio uno de los conyugues decide divorciarse, la asesoría es útil porque ayuda a aclarar cuáles son los problemas que cada quien considera importantes, los recursos que se tienen para hacerles frente y el compromiso para solucionarlos.

Ahora bien, si ambas partes buscan ayuda con la esperanza de que la relación pueda continuar, el pronóstico es bastante bueno.

6.- Buscar un coach de pareja tras una reconciliación

Si una pareja ha decidido reconciliarse, se piensa, por lo general, que ya todo se ha solucionado y no tendrán dificultades por delante; sin embargo, tras una reconciliación, la pareja necesita adaptarse para crear y cuidar los cambios que han permitido que la relación se reconstruya.

Quizá suene como algo fácil, pero evitar volver a viejos hábitos que dañaban la relación es muy difícil, sobre todo si han sido una costumbre durante mucho tiempo.

Adaptarse y construir una relación más sólida, evitar errores pasados y dejar los resentimientos detrás es un proceso. Con la orientación adecuada, esos cambios se incorporan de forma natural, lo que permite a la pareja disfrutar de su relación actual plenamente.

7.- Cambios significativos en la relación

Buscar un coach de pareja cuando hay un gran cambio

Decidir vivir juntos, mantener una relación a distancia por alguna situación externa, casarse, tener hijos, etc.

Hay muchas situaciones que representan cambios significativos en la pareja. En ocasiones, estos cambios pueden crear un desequilibrio entre ellos: preocupaciones, expectativas o ansiedad.

Por ejemplo, debido una situación laboral, uno de los dos debe mudarse a una ciudad lejana por un largo periodo de tiempo.

Este acontecimiento, causará ciertas preocupaciones porque no saben cómo se adaptarán al cambio. Muchas preguntas pasarán por la mente de ambos: “¿Cómo nos acostumbraremos a no vernos en persona durante tanto rato?, ¿Cómo podremos cuidar nuestra intimidad?, ¿Qué significa para mí no poder tener a mi pareja físicamente a mi lado en momentos difíciles?, ¿Qué tal si mi pareja deja de extrañarme?”

Un coach o terapeuta de pareja puede ayudarlos a ahondar en dichas preocupaciones, preparándolos para afrontar el cambio al que se enfrenten.

8.- Buscando un coach de pareja para mejorar la intimidad

Buscar un coach de pareja para disfrutar su intimidad

El sexo juega un papel importante en una pareja; especialmente, que ambos estén cómodos en lo que disfrutan y cómo lo disfrutan.

Cuando existen conflictos en esta área, afectan otros aspectos de la relación. Por ejemplo, si una persona no se siente deseada, no puede mantener el ritmo de su pareja, ciertos gustos y preferencias no son compatibles o existen complicaciones como disfunción eréctil, eyaculación precoz, etc., seguro se sentirá frustrada.

En estas situaciones, el coach o terapeuta de pareja analiza cómo se desarrollan esas dificultades para encontrar las posibles causas y crear una estrategia que les permita trabajar en mejorar la intimidad de tal forma que ambos disfruten y se sientan cómodos; de igual forma, se trabajará en conjunto con un profesional médico, en caso de ser necesario.

Al llegar a disfrutar la intimidad de forma plena, se establece una sensación de conexión y fuerte unión que mejora la interacción con la pareja.

9.- Problemas manejando conflictos externos

Si alguno de ustedes ha perdido su empleo, se encuentra pasando por momentos difíciles por una condición médica, está en un proceso de duelo, etc.

Estas situaciones son difíciles de manejar y la presión de dichos problemas externos a la relación, influyen lentamente en la misma.

Un coach o terapeuta de pareja es una gran herramienta de apoyo para ayudarles a cuidar la relación mientras superan esas dificultades.

10.- Buscar un coach de pareja como un intermediario

Cuando hay un conflicto en tu relación, muy probablemente pienses hablarlo con tus amigos. Su apoyo y consuelo es invaluable, seguramente te harán ver las cosas desde otro punto de vista

Si bien compartir con esas personas que aprecias tiene un gran beneficio y utilidad personal, no debes olvidar que, en ocasiones, es un poco difícil que te den una opinión objetiva, debido a la cercanía y emociones que tienen hacia ti.

Cuando una pareja busca a un coach o terapeuta para obtener un enfoque diferente que pueda beneficiar la relación, tendrán el beneficio de tener un intermediario que les ayude a descubrir, por sí mismos, ese punto de vista distinto; todo esto, de forma objetiva, con una capacitación y experiencia adecuada que los oriente de forma precisa.

¿Por qué buscar un coach o terapeuta de pareja?

Estas 10 razones más comunes para buscar un coach de pareja presentan casos que cualquier persona puede enfrentar en una relación a lo largo de su vida.

Al ser situaciones consideradas «comunes», muchas personas piensan que no es necesario buscar la orientación de un profesional. Sin embargo, es solo con la asesoría de una persona capacitada que tu pareja y tú podrán enfrentar y superar dichas situaciones.

¡Sácale provecho a las dificultades y verás cómo crece y se fortalece tu relación!